¿Qué pasa cuando derrites toneladas de hielo de la Antártica? La gravedad de la superficie del planeta se resiente.

Imagen tomada de la primera nota fuente. La gravedad es menor en las zonas azules y mayor en las rojas. La leyenda dice “Gradiente de gravedad; resolución mejorada a partir de GRACE y GOCE” Hay dos formas de ver la noticia que científicos de la Agencia Espacial Europea difundieron la semana pasada sobre que el adelgazamiento del hielo en la Antártica ha afectado la gravedad de la zona. Uno puede entender que es un avance tecnológico el combinar los datos de dos satélites que miden cambios ligeros en la gravedad de la superficie del planeta, para que sea posible determinar la cantidad de hielo que se ha derretido, o uno puede entender que la noticia es que el derretimiento de ese hielo ha sido tan intensivo que hasta la gravedad se ha visto afectada.

Es innegable que poder medir las variaciones en la intensidad de la gravedad, debidas sobre todo al relieve de la superficie terrestre y a la deformación del planeta por su rotación, es una herramienta muy útil para campos como el de la minería o la oceanografía (como te lo contamos en esta nota). Pero el equipo de científicos a cargo del estudio, coordinado por J. Bouman, del Deutsches Geodätisches Forschungsinstitut (Instituto Alemán de Investigación en Geodésica), no estaba seguro de que los satélites GRACE y GOCE que han medido las variaciones gravitacionales desde hace varios años,pudieran ser tan precisos como para medir los cambios en la densidad del agua en la Antártica; sin embargo, como lo cuentan en su artículo publicado en la revista Geophysical Research Letters, la combinación de los datos de ambos satélites fue suficientemente precisa.

Por otro lado, surge la pregunta de qué tan grave es ese cambio de gravedad en la Antártica, si satélites en órbita fueron capaces de detectarla. Hay que tomar en cuenta que esas variaciones de gravedad en la superficie del globo son diminutas (no te sentirías más ligero ni más pesado en los diferentes puntos geográficos), pero conocerlas es útil porque puede revelar la naturaleza de lo que está debajo. Mientras más denso sea el suelo debajo, mayor es la masa contenida y por tanto mayor es la intensidad de la fuerza de gravedad. Con gravitómetros suficientemente finos, los científicos pueden detectar incluso cuerpos de agua debajo de la tierra o yacimientos de piedras preciosas. El equipo de Bouman ahora nos dice que con las mediciones gravimétricas también se puede saber qué tanto hielo se ha perdido de la capa que cubre la Antártica.

Un equipo diferente de investigadores, del Instituto Alfred Wegener en Alemania, calculó con datos gravimétricos del satélite Cryosat la cifra de 125 kilómetros cúbicos menos de hielo al año en la Antártica. Y tal vez esa sea la verdadera noticia: que el adelgazamiento del hielo de la Antártica es ahora tan pronunciado que incluso podemos medirlo por sus variaciones en la gravedad de la zona. Pero sin importar cuál sea el dato novedoso, el mero recordatorio de que el hielo de la Antártica se derrite con esa intensidad debería ser capaz de preocuparnos.

Fuentes:

Aquí el artículo original de Bauman y sus colegas | Aquí el artículo del equipo del Instituto Alfred Wegener |Aquí la nota fuente del primer estudio | Aquí la nota fuente del segundo estudio.